Considerando el incremento incesante de las distintas formas de violencia en el país, y su reflejo en la vida cotidiana de sus habitantes, con base en el texto intitulado “La autopsia”, del dramaturgo colombiano Enrique Buenaventura, se diseñó una forma de intervención sociológica-teatral para promover círculos de confianza y reflexión crítica sobre las situaciones que originan la violencia que está a su alcance.

La iniciativa consiste en un montaje que se sale de las convenciones más conocidas: foro, escenografía, iluminación adecuada, etc. Se establece contacto con anfitrionas y anfitriones dispuestos a recibir en su domicilio, invitar a familiares, amistades y vecinos (en el caso de comunidades escolares, la asistencia es absolutamente voluntaria) al evento. Para la representación, la disposición mobiliaria de la casa no es alterada ni se crea un espacio especial. Así transcurre la historia de esa familia cruzada por la violencia, el dolor, la muerte y el silencio cómplice. Luego de la función, se abre una tertulia en la que quienes asisten cruzan sus experiencias y advertencias, sin intención de debate o adoctrinamiento. Con ello, se construye una especie de memoria colectiva de la violencia en la vida social y comunitaria. Entre los invitados, suelen haber víctimas de violencia, desapariciones de familiares o injusticias, que aportan su experiencia y contribuyen a “sacar del clóset” el problema. Adicionalmente, dejan breve testimonio escrito, y el evento se reproduce cuando alguno de los asistentes se autopropone para recibir en su casa.

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Créditos:

Actuación; Mariana Arocena, Yolanda Matzumoto, Itzel Tapia, Marina Burgos, Rogelio Ramírez, José Antonio Vega, Simón Guevara, Rafael Gallegos Parra

Asistencia técnica: Miguel Sandoval, Julián Bretón

Dirección: Raúl Bretón

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Contacto: Raúl Bretón | theatrikon@gmail.com

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